miércoles, 18 de septiembre de 2013

No diga recortes, diga independencia

Este no es un artículo para elogiar o criticar la independencia. De eso ya se ha hablado demasiado, y sin duda se volverá a hacer. Este es un artículo para demostrar una obviedad: que el debate sobre la secesión catalana es una perfecta pantalla con la que tapar las vergüenzas de un gobierno autonómico que hace poco entraba al Parlament en helicóptero y que ahora redirige toda crítica recibida como una crítica a Cataluña.
Mas-Colell, Conseller de Economía de la Generalitat

Bravo. Bravissimo, me atrevería a decir.

Para unos, como digo, esto no es más que una obviedad. La cortina de humo es una evidencia desde hace mucho e incluso me pueden tildar de inocente por publicar este artículo ahora. Para otros, y a estos va dirigido este artículo, decir que el Govern utiliza la independencia para ocultar su política económica es mezclar churras con merinas.


¿De verdad lo creen? Puedo pensar que no, que no lo creen y piensan, lógicamente, que reconocer que CiU utiliza la independencia para no hablar de lo que realmente debería de ser comentado sería contraproducente para aquello que (por alguna razón que no comprendo) ustedes consideran la prioridad número uno: la independencia.

Sigan ustedes pensando así, no seré yo quien les diga cuáles deben ser sus prioridades. Eso sí, en días como hoy que se conocen datos del estilo que un tercio de los catalanes estarán bajo el umbral de la pobreza en 2025, no se sorprendan. Y si se sorprenden no culpen al Estado español. Cuya culpa, si bien puede no ser inexistente es, como mínimo, igual a la del Govern de Catalunya.

Sigan ustedes riéndole las gracias al Govern. Sigan, sigan. Al fin y al cabo, si no se han dado ya cuenta que estar a favor de la independencia no rivaliza con criticar el gobierno de CiU, no lo harán jamás.

Por otro lado, puedo pensar que sí. Puedo pensar que realmente no se ponen en la piel de Convergència i Unió. Si lo hiciesen, si se pusieran en la piel de Artur Mas cambiarían de opinión. Hay una cosa clara, mientras la mayoría de partidos que llevan a cabo políticas germano-dictadas de recortes y austeridad son criticados cada vez que las llevan a cabo y cada vez que salen a la luz las consecuencias de dichas políticas, las críticas a CiU que se veían en la calle hasta hace un año han desaparecido. Solo un varapalo tremendo en las encuestas evidencian el hecho consumado que es el bajón histórico de CiU, pero en la calle, absolutamente nada.
Mas "sin Colell". President de la Generalitat

Ahora bien, continúen en la piel del señor Mas y recuerden que ha salido hoy la noticia de que van ustedes no sólo a subir impuestos, sino a crear nuevos, sin olvidar que, de nuevo, eliminarán la paga extra de los funcionarios de la Generalitat por tercer año, cuando los del Estado ya la cobran.

Ahora, sorpréndanse al darse cuenta de que tal noticia aparece relegada al más absoluto ostracismo en las ediciones virtuales de los principales  periódicos del país. Sopréndanse al darse cuenta que como mínimo nueve noticias aparecen por delante de estos recortes, aunque estas sean de otros días, y siempre en torno al debate catalán sobre la independencia.

¿Dejarían ustedes de lado la independencia hasta conseguir que tales noticias fuesen lo realmente comentado? No, por supuesto que no. Y el señor Mas y Convergència i Unió, que sí llevan esa piel, tampoco.


1 comentario:

  1. Me he leído el artículo y me ha gustado.
    A mi parecer CiU está buscando una salida honrosa al berenjenal en que se ha metido. Por mucho que en las calles no haya protestas como debería haberlas en las elecciones sufrirá igualmente un buen batacazo. Está a tiempo de devolver las aguas a su cauce y conseguir un pacto fiscal o un cupo vasco para Cataluña.

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